Por: Raymundo Jiménez C.
Sólo sucede en Minabaches y está de poca madre que todos los sabados ocho regidores trabajen por su cuenta por el bien de su pueblo.
¿Cuántos le dan un ¡SIII..!?
Sólo que en los cinco días restantes de la semana se la pasan de zanganos echando la pinche hueva de a madre y confabulando como destituir al alcalde que por la voluntad del pueblo hoy gobierna.
La Damara merece un análisis más meticuloso y profundo. Sólo diremos que está cuatro días en Xalapa con su novia Elizabeth y un día en Mina que es cuando hay Cabildo y entra sólo para aporrear al viejito alcalde. Se dice que los inútiles regidores de este grupo de ladillosos hacen la coperacha para pagarle sus viáticos a la regidora de pacotilla.
Estos cabrones y cabronas sin escrúpulos pensaron que iban a llegar a ese Ayuntamiento minatitleco a chingarse la lana y a repartirse las obras, sólo que hemos leído acá en Cancún, que el viejito presidente les escondió la piñata del billete para que no la hicieran pedazos.
Ese viejito presidente le está poniendo el cascabel al gato con rabia y les está poniendo el ejemplo de que se puede gobernar bien sin robarse el dinero del pueblo.
Los pendejetes y abusivos regidores andan que se los lleva la chingada y en el colmo de la desesperación tuvieron la brillante idea de denunciar al viejito cabron en la Fiscalía por actos de corrupción, se pasan de idiotas pues es precisamente eso lo que el veterano alcalde no tolera ni permite y como el pueblo es chico todo mundo sabe quien es el Alcalde, y quienes son y de donde viene cada una de esas sanguijuelas.
A veces el pueblo se vota a carcajadas cuando uno de estos babosos y babosas dicen: “porque nosotros también somos autoridad porque el pueblo nos eligió”, jaaaaa..
El pueblo ya no es pendejo, estas lacras trinquetearon las regidurias, jamás el pueblo los eligió porque sabe de que calaña son.
Y he aquí, parte de la truculenta historia.
El rijoso regidor Blas Avalos y su fina mujer Noemí Valerio, quienes tienen conflictos de intereses por lo que jamás este matrimonio debía formar parte del cuerpo edilicio. Estos tortolos del averno hipotecaron el cuchitril donde vivían para comprar las regidurias. El corrupto dirigente del PAN estatal Mancha, quien así como se apellida tiene la conciencia, recibió la billetiza y desplazó a otros pianistas minatitlecos de mayor trabajo político y mucho mejor fama pública. Es así como el “matrimonio infernal” pretende hoy recuperar su inversión.
En otra entrega nos ocuparemos de las otras blancas palomitas que forma el grupo “Regidores Unidos para Re-Chingar a Mina”.
Cada una de estas alimañas tiene su historia. Y si se le rasca para conocer como llegaron a adueñarse de esas regidurias va salí pus y olor a anfiteatro.
Pobres sabandijas si supieran lo que el pueblo opina de ellos, están cavando su propia hedionda tumba política.
Como dice la otra “diputada” de a peso: “He dicho”!!
Y le contesta Foncho su huele pedos: “Que ya nos cargó el payaso jefa…!”