Revelaciones

Margarito Escudero Luis

Hace un poco más de 50 años, por primera vez en la Historia, un gobierno popular llegaba al poder a través del voto. Los chilenos decidieron llevar como su presidente a Salvador Allende en 1970 con la Unidad Popular como partido.

La izquierda latinoamericana daba un gran golpe histórico y se echaron las campanas al vuelo.

Por esas épocas, Carlos Puebla y su grupo cubano Los Tradicionales, dedicó unos versos a esa revolución chilena que resultaron ser premonitorios: “En medio de la alegría, del triunfo pleno,/no te olvides de la CIA,/ chileno, chileno…”

El 11 de septiembre de 1973, el gobierno de Salvador Allende, electo legítimamente, democráticamente, con la confianza del pueblo puesta en esa organización, fue brutalmente desarticulado por un golpe de estado, usando como títere al general Augusto Pinochet.

Tres años duró la alegría del pueblo chileno, tres años que los grandes dueños del cobre chileno, le permitieron soñar a los ciudadanos del sudamericano país.

La mayoría de los medios de comunicación haciendo eco de la estridencia, mintiendo sin cansancio todos los días para ir avanzando en los cerebros del pueblo, hasta que queden convencidos…

Mucho se ha publicado sobre las tácticas y estrategias que se utilizan para desestabilizar a un país, comprar conciencias es algo que les sale muy barato a los intereses extranjeros.

Agitar las aguas, utilizar a los medios de comunicación para esparcir mentiras y crear la percepción de que todo va mal, aunque las evidencias digan lo contrario, provocar manifestaciones contra el gobierno democráticamente electo, usar el fantasma del comunismo, no publicar los logros gubernamentales y destacar los errores hasta hacerlos parecer como una gran crisis.

Lanzar “héroes” que parezcan populares que se dediquen a denostar a los gobernantes y minimizar sus logros y gritar, gritar y gritar que al país lo están destruyendo.

Así crear condiciones para una invasión con el pretexto de salvar la democracia.

Si usted ve algo de lo que aquí se narra, que esté ocurriendo en su país, pues no debe olvidar de dónde viene el golpe.

Hay en México individuos sin patria que todos los días gritan que “están destruyendo al país” que “hay que rescatar a México”, la mayoría de los medios de comunicación haciendo eco de la estridencia, mintiendo sin cansancio todos los días para ir avanzando en los cerebros del pueblo, hasta que queden convencidos de que las mentiras que gritan son reales.

Por eso, “en medio de la alegría, del triunfo pleno…” no olvidemos la historia de Chile, que con un gobierno electo por la mayoría de sus ciudadanos, fue derrocado para proteger los intereses y privilegios de unos cuantos.

Por STAFF