Revelaciones

Margarito Escudero Luis

Le llaman pomposamente “debate” pero no llegan a debatir sino a intentar bajar de las preferencias ciudadanas a los punteros con argumentos que destacan únicamente la parte negativa del adversario, buscando quedar bien, mostrándose “buena onda”.

Pero el historial de aquellos que desean volver a los cargos públicos es una mancha negra que los arropa y que, a pesar de los esfuerzos que puedan hacer por parecer otros, la verdad es que sus actitudes, discurso y apariencia los delatan.

Dicen que “chango viejo no aprende maroma nueva”; curtidos en un sistema descompuesto, donde la corrupción es parte fundamental de su quehacer, los representantes del pasado no pueden negar que detrás de su máscara de salvador se encuentran los demonios que hundieron al país.

La lucha de las mujeres y la lucha por las mujeres es hoy por hoy un tema que no puede hacerse a un lado, pero esos representantes del sistema que se cae, ni siquiera la tienen en cuenta, no cabe en su agenda, por lo que todo lo argumentado tiene fisuras muy grandes por donde pueden verse los vicios que hoy se intentan desaparecer.

José Yunes, candidato del Prianrd no pudo ocultar su misoginia con su burdo intento por insultar a la candidata con un gentilicio; negando a cada paso los proyectos planteados con comentarios negativos, para luego adornarse con sus ideas de gobierno que no aplicaron cuando su partido, amigos y parientes estuvieron en el poder.

Pero la gente que pudo presenciar el famoso “debate”, lo hizo para por presenciar un “match” con golpes donde se permitió de todo, mentiras, difamación y donde la caballerosidad y diplomacia brillaron por su ausencia.

José Yunes, candidato del Prianrd no pudo ocultar su misoginia con su burdo intento por insultar a la candidata con un gentilicio

Rocío Nahle planteó la continuidad del proyecto transformador que inició el actual presidente de la República como un movimiento revolucionario pacífico que permite libertades y enfocado al desarrollo de la sociedad como un todo.

Las preferencias electorales están mayoritariamente del lado de los candidatos de Morena, no hay encuesta seria que muestre lo contrario y se continuará con un proceso electoral como lo marcan las leyes creadas en los tiempos del régimen que tiende a desaparecer, siguiendo el ritual sexenal para el cambio de poderes.

Ni siquiera las cortinas de humo que acostumbran crear los medios de comunicación ha logrado mermar la posición de la mayoría ciudadana, un pueblo que siente ser tomado en cuenta por el gobierno, no dará marcha atrás.