Revelaciones
Margarito Escudero Luis
Hace más de 60 años que científicos ambientalistas dieron la voz de alarma sobre las consecuencias que traería el Cambio Climático; en ese tiempo ni Internet, mucho menos redes sociales existían como contrapeso a la desinformación.
Muy pocas personas en el mundo se enteraron de la tragedia que se venía contra el planeta, acelerada por la actividad humana y que, actuando a tiempo y tomando medidas adecuadas, podría evitarse caer en una situación difícil para todo ser vivo en la Tierra.
Y de esos pocos que tuvieron información, una minúscula cantidad de personas intentaron alertar a los demás para que se hiciera “algo” para evitar que el Cambio Climático alcanzara dimensiones de tragedia, pero nada funcionó a pesar de que, en el transcurrir de los años, el clima nos advertía sobre su cambio drástico.
Los que nacimos hace más de 60 años nos convertimos en la generación industrializada, por lo menos los que tuvimos la suerte de nacer en una ciudad, sobre todo donde la industria es el principal motor de la economía.
Nos alejaron y nos alejamos del campo, de la naturaleza a la que vimos como una buena opción para pasar momentos agradables o vacacionar, pero jamás le dimos la importancia que debería, como el ente que nos salvaría de la catástrofe climática que se pronosticaba.
Hoy, esa generación industrializada y ajena a los procesos naturales, estamos heredando un mundo atacado por fenómenos naturales que antes no existían y que la actividad humana y la mega industrialización ayudaron a acelerar.
La generación más joven, la que se encargará del mundo en unos años más, comienza apenas a notar el desastre en que nos encontramos, con los pronósticos hechos realidad, comienzan a notar que los elementos esenciales para vivir están escaseando en las ciudades, principalmente el agua, mientras que el aire se contamina cada vez más, gracias a un sin número de aparatos que requerimos para vivir con comodidad.
Nos alejaron y nos alejamos del campo, de la naturaleza a la que vimos como una buena opción para pasar momentos agradables o vacacionar, pero jamás le dimos la importancia que debería
No me queda duda que, dentro de muy poco tiempo, serán los jóvenes los que saldrán a negar la civilización actual, a cambio de aire limpio, agua y alimentos sanos; serán ellos quienes encuentren el equilibrio entre la tecnología y la naturaleza, el mismo sistema que provocó la aceleración del Cambio Climático tiende a desaparecer al llegar a su punto máximo de existencia.
Y tendrá que ser muy rápido, antes de que la locura por el dominio del planeta, de todos los países, lleve a los líderes decadentes a tomar la decisión de destruirnos para siempre.
¿Qué podemos hacer los que aún quedamos de esa generación que nació en la mitad del Siglo XX? Aún puede quedarnos algo de conciencia y entregar lo que nos quede de vida a ayudar a contrarrestar los efectos climáticos que han alcanzado una severidad que nunca nos imaginamos a pesar de que nos lo advirtieron.