Revelaciones
Margarito Escudero Luis
¡Vaya show que montaron los Yunes! Acalambraron a la oposición con un movimiento que casi la desbarata
La noticia de que Miguel Ángel Yunes Márquez se pasó a las filas morenistas, traicionando a sus compinches no se ha confirmado, el plan yunista mantiene en la incertidumbre a los senadores panistas; tanto que Marko Cortés subió a la tribuna a lloriquear pidiendo a Yunes Linares que votara contra la Reforma Judicial.
Le recordó que gracias al PAN y a él, sus hijos fueron diputados, senadores y la nuera presidenta Municipal de Veracruz.
Y es que finalmente apareció Yunes Márquez solicitando licencia por razones de salud, por lo cual tomó el cargo su suplente que es su padre Miguel Ángel Yunes Linares.
Luego de la postura plañidera de Marko Cortés, Yunes Linares tomó la palabra y le dijo al dirigente panista que no le deben nada a él que todo se lo ganaron con su trabajo.
Aquí nada tiene que ver con la Patria, se trata solo de salvar el pellejo
Con este enfrentamiento queda muy clara la posición de los Yunes respecto a la votación de la Reforma y se entiende qué es lo que buscan luego de una guerra muy sucia en contra de la hoy gobernadora electa de Veracruz, lo que causa sorpresa, estupor, asco; una traición entre traidores que, a pesar de tomar medidas precautorias para que nadie se saliera del redil, les falló.
No la vieron venir, nunca lo imaginaron, se las pasaron de noche, los agarraron de…
Entre ellos se conocen y no se echarían la suerte si no se conocieran.
El caso es que el instinto de conservación pudo más que el compromiso partidista, aquí nada tiene que ver con la Patria, se trata solo de salvar el pellejo.
Así los Yunes, la tétrica familia que se burlaba de todo y de todos, hoy no dudó en arrodillarse y permitir que desaparezca el último bastión de la derecha.
Así se está escribiendo esta historia, la derecha se envuelve entre su propia porquería, le recetan una sopa de su propio chocolate y se enojan.
Cuando se hablaba de los gobiernos anteriores pedían que no se hablara del pasado; hoy Ricardo Anaya trae el pasado a la mesa para recordar a la mayoría morenista, los tiempos cuando la izquierda fue minoría y soportaba las presiones del carro completo prianista.
Cosas veredes, mío Cid; la Historia está en curso, la mayoría morenista guarda paciencia y mesura ante la desesperación de los prianistas, como disfrutando del festín con la presa dominada.