Revelaciones
Margarito Escudero Luis
Fuerte arranque de gobierno de Rocío Nahle, con una decisión tomada desde que realizaba su campaña, como una promesa para un acariciado anhelo de ciudadanos que tienen que pasar todos los días y varias veces al día por el puente Coatza Uno.
El cierre de la caseta de cobro de ese puente, era una vieja petición de hombres y mujeres, habitantes de Coatzacoalcos, Nanchital, Agua Dulce y otras localidades que afectaba a su economía.
Le tocó a la ahora gobernadora Nahle García hacer realidad ese deseo de la ciudadanía del sur de Veracruz y así, sin necesidad de amenazar a nadie, de provocar muertes y desgracias a las familias, sin “daños colaterales”, la mandataria da muestras de que tiene todos los hilos del gobierno es sus manos y lo ejercerá con energía en favor del pueblo que le ha brindado su confianza.
Veracruz arranca un nuevo episodio en su gobierno y gobernantes, con muchas expectativas, mirando hacia el futuro, pues como que no quieren volver la vista al pasado reciente donde quedan muchos reclamos.
Reclamos que deberían ser atendidos en la medida de su pertinencia, como fue atendido el añejo reclamo del retiro de la caseta de cobro.
En su última visita a Coatzacoalcos, Rocío Nahle dio muestra de que está decidida a escuchar a las personas, a atenderlas en la medida de lo posible, solo pide que le lleven un documento, una petición por escrito. Y es entendible, porque en medio de tanta gente, de tantas palabras, jamás podrá recordar con exactitud una petición verbal.
Y en esas ganas de ser receptiva y de disfrutar de la simpatía popular, Nahle debería estar atenta a las trampas que pudieran ponerle enviados de otros personajes de muy mala reputación, enemigos de la 4T y totalmente ajenos a la militancia.
Es necesario recalcar que llegó a gobernar para todos, tiene presente siempre a las personas y personajes que aportaron mucho o poco para que su triunfo fuera contundente.
El enemigo en casa
Algunos morenistas recalcitrantes andan descontentos y enojados por la llegada de personajes muy identificados con la oposición y buscaron el apapacho moreno para salvar el pellejo o para seguir disfrutando de las mieles del poder.
Reclamos que deberían ser atendidos en la medida de su pertinencia, como fue atendido el añejo reclamo del retiro de la caseta de cobro
El caso más emblemático es el de los Yunes, padre e hijos que no dudaron en traicionar al partido que los llevó a los cargos que hoy ocupan, para venderse ofertando su voto en las cámaras donde se sientan. No deberían perderle de vista, pues sus intereses muy propios, están por encima de cualquier interés social, de cualquier proyecto o programa que no les deje dividendos; recordemos que Yunes linares fue gobernador de Veracruz por dos años y no hizo nada por los ciudadanos afectados por la caseta de cobro.
Su misión era crear un principado dejando a su hijo como gobernador.
Javier Corral es otro ejemplo de la traición que se cierne sobre las bancadas morenas, pues ya dió muestras de que lado tienen su corazoncito y que su filiación conservadora y derechista la tienen pegada al cerebro como una calcalmonía.
Ya declaró públicamente que la presidenta Claudia Sheinbaum lo invitó a sumarse a la 4T y que aceptó poniendo sus condiciones y según dejó ver, entre esas condiciones estaban la de votar en contra de las iniciativas morenistas; es decir, sigue a favor del PRIAN.
Y dicen que son muchos chapulines que llegaron a Morena con el beneplácito de los jerarcas, mientras la militancia aguerrida se queda como el chinito.
Bueno. Son cosas de la política a la mexicana. Solo esperemos que en el pecado no esté la penitencia.