Por:Armando Ortiz
En el primer segundo del primero de diciembre de 2018, Andrés Manuel López Obrador será presidente constitucional de México. Es un sueño que él ha acariciado desde hace 12 años.
En el 2006 estuvo a punto de serlo, pero la intervención del entonces presidente Fox y la “Mafia del Poder” se lo impidieron; algo tuvo que ver también su arrogancia.
En el 2012 también estuvo cerca, no tanto como en el 2006, pero cerca. Esa vez no sólo fue la traición de Calderón a su partido lo que pesó, sino además los mexicanos y mexicanas que en 2012 votaron por un sujeto echo a su medida: Guapo, joven, esposo de una actriz de telenovela.
Pero en el 2018 más de 30 millones de mexicanos se decidieron por López Obrador. La votación fue más que contundente. López Obrador gana con el 53% de los votos. Es hasta el momento el presidente más votado en la historia de este país. Faltan sólo unas horas para que se cumpla el sueño del llamado Peje. ¿Dónde anda en este momento? Para descansar un poco y afinar detalles de la ceremonia de toma de protesta se fue a su rancho en Palenque, a La Chingada, acompañado de Silvio Rodríguez y del presidente de Cantabria, España; fue, dijo él a cargarse de energía. ¡Le va a hacer falta!